Reseña Sanctum: La tecnología Avatar funciona bajo el mar.
“Sanctum” es una película que te sumerge visual y emocionalmente en las profundidades de dos mundos subterráneos: el de las peligrosas cavernas acuáticas, y uno aun más sofocante, el comportamiento humano ante una situación de vida o muerte y las abrumadoras e impredecibles reacciones de quienes enfrentan presiones extremas. Inspirada en hechos reales, “Sanctum” sigue a un equipo de buzos de cuevas submarinas en una expedición peligrosa. Pero el factor sorpresa en forma de una tormenta tropical los obliga a adentrarse más en un mundo desconocido, así que hay que luchar contra la corriente, aguas furiosas, pero sobre todo contra el pánico que los invade y que desata una lucha por la supervivencia que va dejando una estela mortal. Los diálogos no son la parte más atractiva de la cinta, ni tampoco las actuaciones, pero te mantienen atento. Por otra parte, tenía un especial interés en ver como la técnica de fotografía en 3D creada para rodar Avatar (en la que por supuesto está involucrado James Cameron) podía aplicarse en esta historia. Desde mi punto de vista en las escenas exteriores, con paisajes bellísimos filmados en Australia, me recordaron un poco el View-Mater que tenía de niña, me refiero al dispositivo visualizador de discos con imágenes en 3D. Sentía como que tenía que cambiar el disco para continuar. Pero cuando se sumergen en el agua, es otro rollo, el efecto cumple con su cometido y la proyección en 3D en IMAX nos permite disfrutar con un realismo mágico de cada detalle, hasta la más mínima burbuja.
También tenía curiosidad de entender que por que Cameron se había involucrado en este proyecto dirigido por Alister Grierson (“Kodoka”). Entonces leyendo las notas de producción me enteré de lo siguiente: Cameron ha practicado el buceo desde 1969 y ha pasado más de 3,000 horas bajo el agua. ¡Wow! Buscando combinar sus dos pasiones – el buceo y el rodaje de películas – dirigió “The Abyss”, que abrió nuevos caminos en la fotografía e iluminación bajo el agua. Su atracción hacia lo profundo lo llevaría finalmente hacia el “Titanic”. Como preparación para la película, en 1995, Cameron hizo 12 inmersiones tripuladas hacia el Titanic. Para esa expedición, desarrolló equipos de filmación, iluminación y robóticas sin precedentes, que pudieran utilizarse bajo las presiones extremas de la profundidad. El éxito técnico de esa expedición alimentó su deseo de llevar la experiencia de la exploración del océano profundo al público de todo el mundo. Se dedicó a la filmación de documentales y formó Earthship Productions para desarrollar filmes sobre la exploración y la conservación del océano. Me parece muy interesante, por que al leer, logré encontrar similitudes entre el mundo marino y el de Avatar.
Pero volviendo a “Sanctum” y haciendo un balance justo, le doy cuatro palomitas.
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- Teresa Garza
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