Cuando vas al cine es conveniente apagar la parte del cerebro que archiva información y te recomiendo que disfrutes de la cinta como lo que es, una aventura nueva. Confieso que iba con grandes expectativas, a primera instancia por la presencia del director M. Night Shyamalan (The Sixth Sense, Signs, Unbreakble);  y por otra parte, obviamente Will Smith  y su hijo Jaden.

Al principio la cinta me pareció interesante. Familias que han econtrado refugio en otro lugar del Universo, después de que el planeta Tierra se volviera, o lo volvieramos, inhabitable. Una tensa relación entre Cypeher (Will Smith)  y su hijo Kitai (Jaden Smith), en la cual la madre interviene para estrechar los lazos de unión.

Cypher toma la  inciativa de llevarse al jovencito a su nueva aventura intergáltica.  ¡ Oh Sorpresa! La nave se estrella en la Tierra. Los únicos sobrevivientes del desastre son… Si, los protagonistas. (bostezo).

Ahí empezó una jornada que no me convencía del todo. Algo así como una mezcla de  un seminario motivacional, con una sesión de intergación familiar y efectos visuales nada espectaculares. Después de todo adonde llegan es a la Tierra.

Me parecía mucha presión para Jaden (aunque tiene experiencia) cargar el peso de diálgos o monólogos tan profundos.

Pero hubo un algo muy particular, que cambio totalmente mi perspectiva. Sentada junta a mí, estaba una jovencita posiblemente de la edad de Jaden, de unos catorce años. De esas niñas que se sientan con los pies arriba del asiento y hacen comentario de cada cosa que sucede. Fue incómodo al principio, pero después disfrutaba de sus intervenciones.

Lo que ella veía era un niño como ella, a quien podía admirar y se identificaba con él.

“- How Sweet! – He’s adorabel!”

Por otra parte, apreciaba los valores que contenía la cinta. Cuando Cypher dice “El peligro existe.. pero el miedo es una opción”, a la criatura casi se le salen las lágrimas.

“- OMG.He is right.”

Todo esto se los comento porque como el cine es muy subjetivo pueda calificarse como una cinta mediocre, comparada con otras. Pero en resumen, el público es lo que cuenta y terminé por apreciar elementos más humanos, no tan fílmicos. Es un logro, y muy grande, que padre e hijo trabajen juntos.  Will Smith está más guapo que nunca y se ve súper joven. Jaden está en esa tierna edad en la que la cambia la voz y tengo la certeza de que realmente dio lo mejor de si en su interpretación. La cinta tiene muchos mensajes positivos, y este tipo de películas es lo que necesita la juventud. La violencia la vemos todos los días en televisión, pero pocas veces vemos a dos ídolos de los jóvenes apoyando los valores familiares, el respeto y la unión.

Le doy tres palomitas. Aunque después de ver la reacción del público adolescente que aplaudió al terminar, muy seguro que la vuelva a ver. Quiero experimentar desde el inicio esa frescura que brinda el librarse de todo prejuicio.