Como preámbulo,  les cuento que en Noche Buena una de las peticiones de un miembro de mi querida familia fue ir a ver “The Artist”.  Así que apresuramos los preparativos y de una manera poco tradicional para esta noche tan especial nos dirigimos al Cine Bijou en San Antonio, Texas.  Eramos los únicos en la sala.

Es algo así como un homenaje al cine y su historia, específicamente a finales de los años 20’s cuando el cine sonoro desbanco al cine mudo. La visión de su Director Michael Hazanavicus fue muy certera, capturando la esencia de la época. Desde la iluminación, la ambientación, el vestuario y su magnífico casting: Jean Dujardin y Berenice Bejo.  Se nota que Hazanavicus ama verdaderamente el Séptimo Arte y se instruyó para incorporar elementos que no considero cliché, sino más bien recursos utilizados en esa época para darle la mayor credibilidad posible. Solamente porque sabemos que es una película actual la tratamos como tal pero tiene todo los elementos del cine de “La Edad de la Pantalla de Plata” como cuadros de texto para enfatizar diálogos importantes, maquillaje extremo, un lenguaje corporal y expresiones faciales un tanto exageradas (porque ese estilo lo requería).   ¿Y que decir del guión excelente? Excelente aún sin diálogos.  Me parece que más que un viaje al pasado es una invitación a incorporar lo que el presente y el futuro ofrece en cualquier época.

La vida de una súper estrella del cine mudo, George Valentin, (Jean Dujardin) se esfuma con el arribo de el cine sonoro. Llegaron las nuevas generaciones de actores con todo el ímpetu que los caracteriza y adaptandose a la nueva tecnología, entre ellas Peppy Miller (Berenice Bejo), una chica a quien podríamos decir que el mismo George fue quien la descubrió. Valentin se resistió al cambio y continúo con su ilusión de trabajar en  proyectos de grandes magnitudes (incluyendo grandes inversiones) pero sin evolucionar, cuando el público lo que quería era escuchar a los actores, y no solo verlos en pantalla. Mientras la carrera de Valentin desaparece, la de Peppy Miller sube como la espuma, convirtiendo en una de las actrices más cotizadas del momento. Siempre existió un tipo de atracción entre ellos, pero la barrera del sonido, los separaba. Obviamente que esta obstinación o rebeldía por parte de Valentin lo llevan eventualmente a la ruina.

La interpretación de los actores principales Jean Dujardin y Berenice Bejo es suprema, exquisita y carismática. Jean Dujardin luce un look magnético e irresistible; una bella sonrisa que hipnotiza al estilo Rodolfo Valentino y  que divierte al estilo Charlie Chaplin.  Por su parte Berenice Bejo brinda a la cinta la chispa necesaria para darte cuenta que su belleza y su talento también podrían ser mudos

La historia te transporta de la comedia a la tragedia casi sin notarlo. Yo verdaderamente no entendía por que George se resistía al cambio, es decir a unirse al cine sonoro,  hasta el final. Esto me hizo pensar en que seguramente lo mismo debió haberle pasado a muchos actores en aquella época. Solo espero que esta cinta, que me encantó por innovadora y creativa, no se convierta en el recurso de moda y se comiencen a hacer cintas de este tipo en cantidades industriales.  Se perdería el encanto.

“The Artist” además tiene muchas metáforas. A mi me puso a pensar en que la vida es bella en blanco y negro, y sin sonido. Altamente recomendable. Le otorgo cinco palomitas. ¿Tu,  cuántas le das ?