La 83o. edición de la entrega de los Oscares ¡Ya es Historia! Con sus risas, sus llantos, sus palabrotas, sus problemas de Alzheimer… pero sobre todo con la magia y el glamour que solo Hollywood ofrece. El cine sigue su curso y la fuente de producción de ideas y sueños es inagotable. 


Algo que me parece hasta cierto punto cómico es que a pesar de lo “conservador de la Academia”  quisieron presentar una ceremonia un tanto hipster y trendy con la conducción de Anne Hateway y James Franco para atraer a púbico joven. Lo hicieron bien, pero para ser  honesta prefiero a los maduritos.


Dos últimos detalles. ayer hizo mucho frío, así que las pobres actrices (ni tan pobres) con sus hermosos vestidos (bueno algunos no tanto) andaban como diría mi papá todas menuditas, así que un aplauso para esa parte que es como esencial: “las estrellas y sus mejores galas”. Y la otra es una recomendacion muy particular amigos. Tratando de asomar mis narices lo mas que pude a la Ceremonia, la verdad a menos de que vaya uno de invitados o de plano trabajes para un super medio informativo, la manera más divertida de disfrutar de esta gran fiesta es en casa con la “Familia”. La ceremonia en sí la puede disfrutar con detalle después de fiestas y celebraciones, ya enpijamada en casa.